Thursday, February 21, 2008

EL COLMO


"Después de este día no habrá otro". "Después de este día no habrá otro". Una y mil veces se lo repetía antes de decidir levantarse. Esa única vez decidió no meterse a la ducha, ni tampoco acercarse al antiguo ropero para buscar ropa. El cepillo de dientes ya no lo obligaba; con un extraño placer botó a la basura todos sus utensilios de aseo. La extrema barba que plácidamente dormía en su cara tampoco representó mayor problema. "Después de este día no habrá otro" se volvía a repetir en su cabeza. Sus ojos clavados en el espejo del baño parecieron dar gracias por la firme convicción. En el fondo, no veía más que unos simples ojos, con lagañas. Pensó que era tonto mojarse la cara ya que afuera llovía fuertemente hace rato. Echó un vistazo rápidamente a las cosas que quedaban aún en pie en su pequeño departamento, pensando que tal vez encontraría alguna cosa digna de acompañarlo en aquel momento. Buscó en vano, "no podía ser de otra manera" se dijo de inmediato. Con un poco de risa se acercó a la pared principal y vio la serie de rayas verticales que adornaban un costado de ésta. Pasó su mano por las rayas y empuñó su mano. Cuando estuvo listo, agarró las llaves de su hogar -por si algo salía mal- y abandonó la habitación.
Su largo y desordenado cabello se mojó en un instante, al igual que las demás partes de su cuerpo. El agua le hizo notar que aún conservaba algo de vitalidad. Comenzó a caminar por la avenida principal; esa vez no le importó la violenta velocidad de los autos, ni la infaltable imprudencia de uno que otro peatón. Pasó frente a un restaurán famoso, que a pesar de la lluvia, estaba repleto de par en par en la hora del desayuno. Su cuerpo desnudo caminando en la calle fue de inmediato el centro de atención. Las ancianas repletas de anillos de oro y abrigos de pieles falsos exigían a los mozos que hicieran terminar el desagradable espectáculo. "Esto es el colmo" repetían una y otra vez. Antes que le dijesen algo, el hombre comenzó a caminar al edificio del frente. A los pocos segundos, desapareció en la oscuridad de éste.
Le dijo al ascensorista que se dirigía al último piso, al mismo tiempo en que éste veía como el agua comenzaba a inundar el pequeño ascensor. No pudo despegar su vista de ese cuerpo peludo y mojado. El décimo piso estaba vacío, quizá era por la fría mañana de lluvia. Caminó lentamente, buscó la azotea y se dirgió hacia ésta. En ningún momento había soltado las llaves de sus manos. Cuando estuvo parado en el borde del edificio; a pesar de que sus pies ya se habían puesto a temblar, pensó que era el momento preciso para tirar lejos las llaves. A los pocos segundos, las señoras del restaurán comenzaron a salir una tras otra a la calle. Él miró su andar como hormigas detenidamente. Cuando las perdió de vista, trató de imaginar las triviales conversaciones que ellas podrían estar teniendo. Dejó de buscar pretextos en su mente que significaban una evidente distracción y se propuso hacer lo que lo llevó hasta ese lugar. Agarró fuertemente sus llaves e hizo el gesto de lanzarlas lejos, mas su mano nunca las soltó. De inmediato, el miedo de otras veces volvió a aparecer. Trató de lanzarlas de nuevo, pero obtuvo el mismo resultado. No quiso volver a pensar negativamente, así que consideró el asunto de las llaves como de menor importancia. Decidió focalizarse en la tarea realmente importante. Miró los techos de la ciudad y la gran distancia que existía entre donde estaba él y el piso. Se armó de valor e intentó lanzarse al vacío; su cuerpo no se movió ni un centímetro. El miedo lo invadió completamente, exactamente como ocurrió en las veces anteriores. No quiso seguir intentándolo en vano. Agarró las llaves y comenzó lentamente a devolverse. Las gotas de lluvia pesaban cada vez más, además ya le molestaba tanta agua en el cuerpo. Caminando por la avenida, no pudo evitar escuchar las burlas e insultos de un grupo de borrachos que trataban de cubrirse como podían de la lluvia. Quizá pensaron que ese cuerpo caminando desnudo era mucho más desgraciado que ellos. Al llegar a la puerta de su habitación, la llave cedió fácilmente de la mano y logró abrir la puerta. Buscó entre el desorden la toalla de siempre para secarse, luego se sentó en el suelo apoyándose en la pared de las rayas. Tomó el plumón negro de siempre y ágilmente añadió una nueva raya vertical a la pared. Ya se había acostumbrado muy bien a la mecánica de las rayas. No quiso contarlas, por miedo. Se quedó en el suelo con las manos en la cabeza, pensando en que lo que seguía era ordenar un poco y asearse, pensando en que nunca vencería el miedo, pensando en que la existencia del hombre no era más que la llave de su departamento, aferrada irrefutablemete a la vida, pensando que jamás tendría el valor de morir y poner fin a todo, pensando que aquellos que creen que la muerte es la máxima condena humana, estaban -como todos- muy equivocados, pensando que su colmo era no poder dar fin a su colmo.

9 Comments:

Blogger Joancita said...

Wena Carloncho...

Bueno.. primero que todo.. gracias por el honor...jeje

Qué gráaafico, muy bien narrado, porque casa cuadro se dibujó completamente en mi mente, tanto el hombre, como l habitación, todo todo. Eso como primera impresión lo encontré buenazo. Luego viene lo que poyecta, eso de estar constantemente atrapado a nuestros miedos, no lo vi sólo como el miedo a la muerte, sino como a cualquiera de nuestros miedos y al cómo nos aferramos casi estúpida e involuntariamente a lo que nos da seguridad, a lo que nos da "refugio", a lo que nos protege del riesgo. Creo que eso le pasa a la mayoría de las personas, que están o estamos constantemente dibujando rayas y rayas sin nunca ser capaces de desprendernos de lo mundano, de lo material (y no me refiero a riquezas o placeres.. nada de eso... me refiero a todo)

Me gustó en serio todo eso que pude interpretar, ciertamente lo que uno lee lo lee con toda la carga de la subjetividad, la carga de uno mismo, por lo que pude haber visto algo muy distinto a lo que tu quisiste proyectar, pero eso es lo mágico de las escrituras, de las creaciones en general.

Yo creo que si esto lo haces, lo plasmas así audiovisualmente quedaría sensacional en un video de Radiohead jajajja,... o no?
de más... a mi me pegó así todo el rato.

Besos, Carloncho.... y miles de cariños a ti a la Clau y a tu bebe que aún no tengo la alegría de conocer.

Adiosiiin!

Tu siempre aiga (pese a la distancia), Joancita.

2:23 PM  
Blogger Joancita said...

amiga, quise decir... jajja

Y se viene se viene la ansiada visita a Gaspar!!!

2:24 PM  
Blogger Unknown said...

Mira. Por lo menos a mi, me da muchísimo miedo no saber cuando se acaba todo, no saber que va a pasar con lo que se queda y con lo que realmente importa...

Entiendo tanto esa visita al edificio, ese intento por controlar lo incontrolable y transformar en tangible lo que jamás estará a nuestro alcance.

Lo curioso sucede cuando se acompaña ese lindo pensamiento con la suma de todos los miedos. Ambos se hacen constantes y el día a día puede convertirse en un colmo.

Nunca imaginé como sería esa desagradable mezcla hasta ahora. Gracias Carlos por permitirme un momento de paranoia.

;) suerte.

2:46 PM  
Blogger Unknown said...

El miedo que tiene el protagonista y la fórmula para aplacarlo y los resultados de esa fórmula, causan una sensación de angustia. Sobre todo cuando se narra el momento en que va a saltar - está super bien la relación de las llaves en sus manos con el apego a la cotidianidad y a la realidad real- y su arrepentimiento.
Esa pared -principal-, que tiene plasmado todos los intentos que ha tenido ese hombre de aplacar sus miedos, es una imagen super potente hacia el final del cuento -la verdad es que al principio no entendía por qué se nombraba una "pared principal"-. Esa pared es la que acusa la pequeñez del protagonista y a su vez la que lo matiene con espectativas y la que lo hace avergonzarse. Es en el momento en que hace una ralla en la pared que el lector se da cuenta de la miserable existencia del hombre y la mucha razón que tenían esos borrachos de burlarse...
Es una historia redondita, en ella nos acordamos de nuestros propios miedos hacia la muerte o hacia una realidad que nos incomoda y hasta nos hace perder el control por no poder cambiarla.
Los peros que me surgieron tienen que ver con algunas cosas que encuentro demás, como por ejemplo "con lagañas", considero que es poco estético y además un dato que podemos agregar nosotros los lectores; cuando dices "empuñó su mano" me da la impresión que va a ir a fuera a enfrentar algo, pero no de la manera que tiene él de enfrentar su miseria - intentando matarse-, sino de una forma efectiva. Por último es un tanto inverosímil que se pueda pasear desnudo sin mayores problemas, y también me resulta irreal que un hombre que quiere terminar con su vida salga llamando la atención de esa forma, me hace pensar que la verdad bien en el fondo, es que quiere que lo paren y que impidan que lo "vuelva a intentar". Pienso que salir desnudo puede sonar atractivo, pero no resulta muy real.
Sí podría haberse desnudado momentos antes de lanzarse.

Fin.

Claudia

5:35 PM  
Anonymous Anonymous said...

Wooooooooooooooooooooooooooooooouuu, primero que todo, que bien escibes, y segundo esto fue lo que me pasó al ir leyendo; primero la historia me atrapó al tiro, estuve entretenida todo el rato, hasta el final que me decepciono un poquito, sentí que era predecible, de todas maneras hubiese sido más que se hubiera lanzado, pero hasta ahí hubiera llegado la historia, creo que el protagonista debería habr sufrido otro vuelco, que le haya pasado algo más trágico, me explico que derepente se hubiera lanzao y haya quedado paraplejico jajaajjaa (las cosas que pongo) pero siento que eso hubiera sido más trágico, porque sería una frustación que la llevaría por el resto de sus días en una silla de ruedas, no sé, creo que una cosa asi, hubiera sido más "colmosa", pero bueno quien soy yo tb para venir a cambir la historia jajajajaja, lo principal es que me atrapo y eso quiere decir que sabes escibir porque logras capturar a la gente, y eso es bacan :).
Eso, esa es mi humilde opinión, te mando saludos y mañana por fin conoceré a Gaspar!!!! que por lo que se ve en la foto de la Clau está exquisito!!! muy bello :)
Te felicito y sigue escribiendo, porque teni pino.
Besos
Ursula

6:44 PM  
Anonymous Anonymous said...

Carlitos!!
jeje un poco triste la historia, pero me encatntó tu forma de narrar, haces que de verdad nos sintamos en el lugar, como viendo al pobre tipo caminar en la lluvia y a las señoas del restauran. De verdad muy buena, la podías hacer un corto sería bueno. Además q cuentas muy bien la historia del pobre tipo sin decirnos nada de su vida, pero nos haces entender cómo se siente tan bien q es como si lo conociéramos o si hubiéramos seguido su vida desde antes y este fuera un capítulo más pa leer. El final tb está muy concordante con la historia, no se podría haber matado habría sido inconsecuente con su vida o con lo q nos estabas contando antes. Me gustó, la podrías mandar a un concurso.

Ya lokillo cuídate, que estés muy bien, saludos.
Un besito!
Coni

8:30 AM  
Blogger Oozkar said...

Original, con ese ritmo narrativo que siempre te ha caracterizado y un final sencillo, pero concordante.

Mis intereses literarios, eso sí, van por otra línea, por lo que no estoy en la posición para agregar más.

Pasó harto tiempo, ojalá que todo te resulte bien en lo que viene.

Saludos

8:11 PM  
Anonymous Anonymous said...

Estimado primito,
la verdad bien bueno tu cuento....fascinante por no decir menos.

Tal vez no puedo dar esos comentarios tan bien narrados y analizados como el de tus fieles "posteadores"
pero te puedo dar la opinión de una persona que se ha sentido de esa misma forma tantas veces...
Voy a ser sincera...no me gustó el final...se parece al final de un libro que leí...en realidad de cuentos, eran tan buenos los cuentos pero el final era lo que menos esperabas, en todo caso tu forma de escribir va muy bien con ese estilo interesante y real, con el estilo de un cuento real.
Aún no tengo tiempo de leer el resto, pero pronto lo haré
te quiero mucho, estamos hablando
(debo irme, en otro momento sigo te parece)
Rommy

1:50 PM  
Anonymous Anonymous said...

oie tonto, me encanta como escribes!
lo que me provocó tu historia me lo guardo. total..lo q importa es q provoca cosas..
en fin..nos vemos la proxima semana supongo..
saludos a la claudia i gaspar
besus
au revoir

5:04 PM  

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